El Parque Nacional (PN) Revillagigedo, es el territorio insular más lejano del continente, ubicado en el pacífico mexicano y conformado por cuatro islas de origen volcánico: Isla San Benedicto, Isla Socorro, Isla Roca Partida e Isla Clarión. Las islas están bajo la gestión directa del Gobierno Federal, en este caso la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Secretaría de Marina (SEMAR). Es el área marina de no pesca más grande de Norteamérica, y un lugar único por su riqueza biológica, con una extensión de 14 millones de hectáreas y un Patrimonio Natural de la humanidad por proteger.
La lejanía del PN, la extensión de la superficie marina, terrestre, las difíciles condiciones de acceso y la falta de infraestructura en campo, lo convierten en un área con un grado de complejidad mayor en su operación, no sólo por su difícil acceso, sino para desarrollar estrategias y acciones de monitoreo biológico, restauración, supervisión y vigilancia, las cuales son prioritarias para su conservación.
Es por ello que los esfuerzos del Parque se han dirigido estratégicamente en dos rubros:
- Impulsar alianzas y realizar gestión con autoridades, organizaciones e instituciones, que contribuyan a fortalecer la operación y capacidades del personal.
- Implementar el uso de tecnologías satelitales para realizar acciones de monitoreo, supervisión y vigilancia de las embarcaciones que realizan actividades alrededor y en dentro del Parque.
En este contexto, gracias a un esfuerzo de gestión y trabajo conjunto con la SEMAR, el PN logró trasladar su primera embarcación, a Isla Socorro, para apoyar directamente a las acciones de supervisión, vigilancia y monitoreo.
Por otra parte, el personal del área, utiliza tres plataformas tecnológicas para monitorear satelitalmente la pesca comercial, el transporte marítimo y embarcaciones turísticas: Sky Light, el Global Fishing Watch, y el Sistema de Monitoreo Satelital (SISMEP). Estas plataformas utilizan imágenes y datos satelitales para generar información de fácil acceso de manera gratuita y han permitido optimizar esfuerzos y recursos.
El uso de las tecnologías es una de las soluciones para la facilitación de los procesos de mejora y reducir las amenazas sobre los recursos naturales; sin embargo, el reto latente es, desarrollar protocolos de actuación y lograr una pronta respuesta y una coordinación con autoridades federales para atender los posibles actos ilícitos en el área marina protegida.
La visión es seguir impulsando la incorporación de tecnologías que permitan tomar decisiones de manejo que contribuyan a un manejo efectivo del área natural.
