El Museo de Dubrovnik anunció la semana pasada el descubrimiento de un casco grego-ilirio en el yacimiento arqueológico de Gomile, muy cerca del pueblo de Zakotorac, en la península de Pelješac, Croacia. El estado del mismo impactó a la comunidad de expertos y aficionados por su entereza y conservación. Se estima que tiene un origen es propio de la segunda mitad del milenio antes de Cristo, según advirtieron las fuentes oficiales.
Europa posee un rico patrimonio arqueológico con restos que van desde hace siglos hasta los miles de años de antigüedad, muchos de los cuales se encuentran en perfecto aspecto. A diario las noticias sobre este tipo de hallazgos conmocionan a la comunidad científica, porque cada fragmento, por más pequeño que sea, puede ayudar a explicar y entender mejor las costumbres y la historia del ser humano.
El casco apareció junto a una serie de tumbas, incluso con el cadáver de su propietario, y contribuye al conocimiento de los rituales funerarios de los pueblos ilirios entre los siglos 700 a 500 a.C. Según especificó la entidad citada anteriormente, “el área de Peljesec está clasificada como una de las zonas arqueológicas más significativas de la costa este del Adriático”, por lo que este hallazgo representa un tesoro invaluable para Croacia.
Este trabajo cuenta detrás con un amplio grupo de expertos. El mismo está coordinado por el Centro de Investigación Prehistórica con arqueólogos del Departamento de Arqueología de la Facultad de Filosofía de Zagreb, el Instituto de Arqueología y los Museos Dubrovnik, con la colaboración de colegas del Museo de la Ciudad de Kor čula, el Museo Dolenj de Novi Mesto en Eslovenia y La Academia de Arte en Split.
En excavaciones anteriores, se descubrieron varias tumbas con esqueletos del IV a.C. Además de ajuares funerarios, como anillos, pulseras, alfileres de bronce y, en la actualidad, cascos. El último es el segundo que se retiró y es también de bronce, por lo que posiblemente fue enterrado como una ofrenda.
En diálogo con el medio especializado en arqueología, HeritageDaily, un representante del Museo de Dubrovnik comentó: “Junto con numerosos hallazgos de joyas, trajes y ajuares funerarios, este descubrimiento de un casco contribuye de muchas maneras al conocimiento de los rituales funerarios de las comunidades ilirias en la segunda mitad del siglo XIX del último milenio antes de Cristo”.
En un video que compartieron sobre el casco en cuestión, es posible ver cómo lo retiran del espacio delimitado y lo guardan en una caja especial para su posterior análisis.
Hrvoje Potrebica, profesor del departamento de arqueología de la Universidad de Zagreb, explicó que este desentierro “habla de una continuidad de poder de la comunidad respectiva. Estos cascos siempre han sido un símbolo de algún tipo de estatus y poder”.
Hasta el momento, la entidad académica señaló que se extrajeron 30 vasijas, en su mayoría de procedencia griega. Estas se consideraban como objetos caros y preciados, que solo se regalaban en el evento funerario, para que la persona volviera a la vida con opulencia.
En tanto, según indicó la institución, este trabajo se lleva a cabo gracias al incentivo gubernamental para preservar los yacimientos históricos que hablan de su identidad y cultura milenaria. En adelante, se espera un seguimiento de más áreas que puedan incluirse a su conservación.
Con información de La Nación.