El universo nos guarda una infinidad de misterios, los cuales la ciencia sigue tratando arduamente de revelar su origen y funcionamiento. Recientemente, la humanidad una vez más es presencia de un enigma que se esconde en el cuarto planeta de nuestro Sistema Solar, Marte.
En los últimos años, Marte ha sido blanco de muchas investigaciones y estudios científicos, la carrera de las agencias espaciales por conquistar la superficie de este planeta está a tope, puesto que los avances tecnológicos de la última generación han permitido que la raza humana haya podido poner su presencia en Marte, aun si es por medio de robots.
Para ser específicos, Marte, también conocido como <<el planeta rojo>>, tiene un tamaño aproximadamente equivalente a la mitad del tamaño del planeta Tierra, y cuenta con características únicas como el hierro oxidado que se encuentra por toda su superficie, mismo que le da esa tonalidad rojiza al planeta, también su atmósfera se compone de porcentajes diferentes de dióxido de carbono, nitrógeno y argón. Así mismo, tiene comparte otras características de la Tierra como tener estaciones, polos polares, actividades volcánicas, cañones, entre otras similitudes con nuestro hogar, según información de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, también conocida como la NASA, en tu plataforma virtual Space Place.
Desde que los científicos empezaron a centrar la atención en Marte, este maravilloso planeta no los ha dejado de sorprender, regalándole sus misterios para que nuestra raza pueda revelarlos. Tal es el caso del Rover Zhurong de China, el cual fue lanzado el pasado 2020 para ir a su destino, Marte. Este es descrito por la administración de aeronáutica como un rover de propulsión para la exploración marciana, el cual ha logrado recopilar un sinfín de información, análisis, fotografías, escáners, entre más, tan solo en el tiempo que lleva en la superficie de Marte.
Entre todos los descubrimientos que el Rover Zhurong recopiló, se encontró uno que dejo a algunos de la comunidad científica con la boca abierta, pues se trata de cuñas poligonales irregulares entradas entre el polvo de Marte a algunos metros de profundidad.
A 35 metros de profundidad, en una zona marciana conocida como la <<zona de Utopía Planitia>> una zona encontrada en una de las cuencas más grande del planeta rojo. Te preguntarás cómo lograron ver estas acuñas aun estando tan debajo de la tierra, pues te platicamos que el Rover de China tiene varias capacidades diferentes, entre ellas unas radas para subsuelos, con esto los científicos pudieron encontrar varios metros debajo del suelo de Utopía Planitia.
Científicos de la Academia de Ciencias de China en su departamento de geología y geofísica publicaron recientemente un artículo de Nature Astronomy en donde se exponen estas figuras geométricas antiguas, polígonos irregulares que van desde los centímetros de tamaño hasta varios metros en una gran extensión de tierra, y se cree que estás figuras geométricas fueron creadas a partir de cambios climáticos en el planeta rojo o ciertos procesos volcánicos.
Se estima que son al menos 16 acuñas poligonales que difieren en tamaños entre ellas y repartidas entre 1,5 kilómetros de extensión en la cuenca más profunda de Marte, Utopía Planitia. Y se piensa que estas formas geométricas se formaron aproximadamente hace 3.700 y 2.900 millones de años, en un Marte muy antiguo.
Fue en un planeta rojo joven, primitivo, muy diferente al que conocemos hoy en día. Marte contaba con un clima que lo mantenía húmedo en todo momento, cuando esto terminó, empezaron procesos de congelamiento y descongelación, lo que terminó por darle forma a estos asombrosos polígonos.
Así mismo, debido al proceso geológico que siguió el planeta rojo, estás acuñas terminaron quedando enterradas por una capa de 35 metros de material marciano.
Sin embargo, los mismos científicos también agregan la posibilidad de que estas formaciones geométricas tengan que ver con un antiguo flujo volcánico que fue enfriado y solidificado, dejando atrás las formaciones geométricas que se mencionan en esta nota.
La llegada de la información recaba por el Rover Zhurong aún es muy nueva, los científicos siguen trabajando sobre ella para averiguar más, además aún se esperan más datos de la máquina que se encuentra en Marte. Sin duda es emocionante como la humanidad poco a poco va encontrando las respuestas de los misterios del universo.